Antes de que finalizase la Guerra de Corea, nuevos portaaviones entraron en servicio, y una nueva generación de cazas de reacción empezaron a verse sobre sus cubiertas ... Los nuevos aviones de reacción no eran fiables: contaban con motores poco potentes que además tenían una peligrosa tendencia a explotar o a incendiarse ... Los pilotos adoptaron una actitud fatalista respecto a las posibilidades de llegar a la edad de la jubilación. De todo ello surgió la filosofía de "vivir el día a día", que los dominó durante los años sesenta y a lo largo de toda la Guerra de Vietnam.

Pág. 97-98